Estuve unos días en una de las islas del mediterráneo de Italia, uno de los lugares que todo el mundo quiere venir al menos una vez en la vida, por sus playas, montañas y por su ambiente. La isla de Cerdeña.
Sinceramente fui a desconectar unos días en este pequeño paraíso, pero no quise dejar pasar la oportunidad de poder enseñaros un lugar mágico al norte de esta isla.
Valle de la luna, El paraíso Hippie de la Isla de Cerdeña🎖️
¡Me harías muy feliz si le das click! 😛 ->En esta zona de la isla de Cerdeña, el tiempo se ha detenido, y hay muchas personas que crearon una comunidad hippie en plena libertad lejos de la ciudad y la tecnología, entre sol, mar y viento. viviendo en cuevas, cabañas y tiendas de campaña. De hecho yo me traje la mía para pasar la noche allí.
Todo el area esta dividida en siete valles con enormes rocas de granito de peculiares formas.
Las rocas del valle durante el dia son de color polvo, y por la noche tienden a tener un tono blanquecino, como el de la superficie lunar, de aquí viene el nombre del Valle de la Luna.
La comunidad que ha vivido aquí ha construido refugios con madera, paja y materiales reciclados, cumpliendo con la filosofía tradicional, que es usar la naturaleza y vivir solo de ella.
En realidad es propiedad privada pero el propietario decidió hacerlo público sin limites de acceso. Aunque esta comunidad lleva desde los años 60 aquí y este en su derecho legal de poder vivir aquí, no es de agrado de todo el mundo. Muchos no aceptan el estilo de vida que hay aquí, si bien es cierto que los que vienen aquí tienen una misma ideología, pero siempre hay alguien que tiene ideas diferentes, drograndose y bebiendo en exceso, molestando a la gente o incluso robando a los de la comunidad y al pueblo.
La personas que viven en este lugar no quieren manchar su reputación por este tipo de personas. Siempre intentar mantener una comunidad pacifica.
Se han creado incluso organizaciones a favor del desalojo de este lugar, no están de acuerdo con que hayan personas viviendo aquí, incluso algunos hablan de demonizar a la comunidad. Piden el desalojo permanente para que sea accesible para todos con seguridad. Desde que llegue aquí he notado todo lo contrario a falta de seguridad. El ambiente aquí es todo lo contrario a dañino.
Estos sitios me hace recordar que no tengo que olvidar de cuidar mi mente, de relajarla y conseguir esa paz. Estar conectado con la naturaleza me hace bien, nos hace bien, y estos sitios es como un abrazo cuando estas roto, te recompone y te da fuerzas. En mi vida he tenido muchos bloqueos personales y emocionales, como el que justo estoy pasando ahora, en el que también influye en mi creatividad. La solución siempre ha sido venir a sitios así, llenos de energías positivas y buenas vibras rodeado de naturaleza, y estar conmigo mismo. Descontaminas pensamientos y conectas con tu cuerpo.
¡Y se acabó Fugitivos!
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